En el recorrido de los Mazenodianos, el mes de febrero estuvo marcado por el viaje a Roma donde los recibían los Oblatos del Escolasticado Internacional. El encuentro con el Padre Louis LOUGEN, Superior general, fue un momento importante de ese viaje.
Entre los objetivos que se fijaron los Mazenodianos, está el de tejer lazos fraternos con las distintas comunidades oblatas y los jóvenes que trabajan con los Oblatos en Francia y en el extranjero. El encuentro con los Oblatos del Escolasticado Internacional y de la Casa generalicia es un nuevo descubrimiento. La internacionalidad de esas dos comunidades es un buen reflejo de la dimensión universal de la Congregación.
Durante el encuentro con los Mazenodianos, el Superior general los animo a redescubrir la llamada a la santidad. “Cada día tenemos que comprobar si seguimos en el camino de la santidad”, decía.
El viaje a Roma también es el descubrimiento de las cuatro basílicas mayores y otros muchos lugares sagrados o sencillamente turísticos de la Ciudad eterna.
Krzysztof ZIELENDA, OMI